¿Tenéis un montón de tazas o pocillos iguales? ¿Estáis cansados de que cuando tenéis visita siempre tengáis que usar esas tazas aburridas y sosas que os han salido baratas en Ikea? ¡No os preocupéis! ¡En un ratito tendréis ese “problemilla” solucionado! Y además le daréis un toque especial a vuestra hora del café.
Os recomiendo que hagáis diseños sencillos. Lo complicado a veces está sobrevalorado, y ya sabéis; menos es más. Y os lo digo porque he tenido un percance queriendo complicarme más de la cuenta… Si queréis saber qué me ha pasado… ¡Seguid leyendo! ¡Comenzamos!